La solidaridad es un valor que deberíamos practicar todo el año e inculcarla en nuestros hijos, familiares y amigos. Es el valor que inspira y guía las iniciativas que desarrolla el Voluntariado Barcan, integrado por profesionales de Representaciones Barcan y sus familias.
Y, aunque 2020 fue un año retador, no impidió que nuestro Voluntariado compartiera alegrías, cariño y compañía a los niños de la Casa Hogar Engracia de Eddings y el Albergue Sagrado Corazón de Jesús, apoyara algunas de las actividades de la Parroquia Cristo Rey, y obsequiara alimentos a familias y transeúntes necesitados, e incluso juguetes a niños de zonas desfavorecidas.
En todas nuestras jornadas se cumplieron las normas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud para evitar la propagación del virus Covid-19.
Ayudar a quien lo necesite
La solidaridad con los más desprotegidos no requiere necesariamente un cuantioso desembolso económico. Hay algo mucho más valioso que puede entregárseles: tiempo. También es posible donar alimentos, artículos de higiene diaria, ropa y juguetes nuevos o en buen estado, cuentos para los niños, y medicinas.
Recordemos que, si bien la Navidad es una época emotiva en la que una mayoría se anima a realizar buenas acciones por los demás, no tenemos que limitar la solidaridad exclusivamente a estas fechas.
Asumamos el compromiso de apoyar a quien nos necesita. Juntos podemos construir un mejor futuro para nuestros hijos. La solidaridad es permanente.
(Fotografías tomadas del archivo institucional de medios de Representaciones Barcan, C.A.)